Para la depilación se aplican destellos concentrados de una luz visible y segura para remover el vello no deseado de todas las partes del cuerpo, sin dañar el tejido de alrededor. El tratamiento es rápido, efectivo y cabe destacar que no presenta riesgos para el paciente.
Cada vello contiene un pigmento (melanina) que absorbe la luz y la convierte en calor. El calor absorbido apunta al folículo y afecta su habilidad de producir nuevo vello.
Los resultados son visibles desde el primer tratamiento y se recomienda una serie de 6 a 10 sesiones para alcanzar un resultado sin vellos a largo plazo en la zona tratada.

Contamos con la tecnología Alma Laser y Trios.